Jesús, el Maestro de Galilea, Luz de la Luz, tenía que, para poder esposarse sagradamente (también físicamente) con María Magdalena (María de Betania) liberarla de la Oscuridad que todos tenemos en este plano Físico de cuarta Dimensión Cósmica. Por ello, realizó en El la Sanación que todos conocemos como liberación de los siete demonios. No fue un exorcismo, sino una Sanación Cósmica, una Liberación Astral y Física para que en María sólo quedase la Luz que Él le trasmitió... De ahí pasaron al siguiente paso: su esposamiento, sagrado... Por ello, todas las mujeres pueden acceder a esta Sanación Crística de María Magdalena.
Toda mujer, toda Sakti lleva en su interior a María Magdalena, al Principio Femenino. Porta en su esencia la magia espiritual de la Diosa. Toda Sakti es diosa y maga, por lo que sabe, puede y desea amar y sentirse amada, compartir y ser venerada. Toda Sakti puede y debe ser feliz, crecer cada día, porque la Luz está en ella, oculta por la Sociedad patriarcal que le niega su realidad, su magia...
Pero puede liberarse, sanarse, iluminarse como María Magdalena lo hizo en su momento. Con la Iluminación de María abrió el camino, de nuevo, para que todas las Saktis de todos los tiempos puedan seguir su senda de luz y amor...
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